Los tres pilares de Asofondos para reformar el sistema pensional en Colombia 

Montenegro aseguró que el pilar contributivo del sistema deberá ser de capitalización individual, con administradores privados y públicos.

Santiago Montenegro, presidente de Asofondos, al cierre de un nuevo Congreso Fiap, se refirió a los retos a los que se enfrenta el país en materia de mejoras al sistema de pensión nacional. 

La creciente desconfianza en la democracia fue tema de análisis del Congreso, dijo Montenegro. Explicó el presidente de Asofondos que la coyuntura sin duda angustia, y no es un problema exclusivo de Colombia, por lo que no se puede quedar en explicaciones simplistas. 

Hizo un llamado Montenegro a que se tenga muy presente hacia dónde va el país y cómo el populismo en épocas de crisis puede terminar siendo un mal mayor para el país. 

“La movilización social, hay que comprender, es más compleja de lo que se piensa y hay que abordar todas sus motivaciones”, dijo. 

Por lo demás, Montenegro planteó tres propuestas para cambios a la protección de la vejez: el primero de estos es que, debido al envejecimiento de la población, la relación entre trabajadores activos y adultos mayores va a seguir cayendo. 

Lo anterior “hace inviables a los sistemas de pensiones de reparto o los regímenes de prima media, como los llamamos en Colombia”, advirtió Montenegro. 

En segundo lugar, para Asofondos, Colombia enfrenta dos problemas que ha heredado del pasado. “Por un lado, unos subsidios regresivos a los pocos que alcanzan a jubilarse y, por otro, unas devoluciones de saldos a los que no se jubilan, las llamadas indemnizaciones sustitutivas”, por lo que también se requieren cambios en ese sentido. 

Lo anterior, agregó Montenegro, no permite reconocer una tasa de interés real a los afiliados y por lo que “son una verdadera expropiación, que recae sobre los afiliados de menores ingresos”.

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Y finalmente, Montenegro aseguró que el pilar contributivo del sistema deberá ser de capitalización individual, con administradores privados y públicos, “operando bajo las mismas reglas de juego”.  

“Tenemos que seguir fortaleciendo las pensiones voluntarias para aquellos que tienen mayor capacidad de ahorro y quieren cubrir mejor los riesgos de vejez”, concluyó Montenegro.

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