Jaime Jaramillo, codirector del Banco de la República de Colombia, dio a conocer sus primeras impresiones de la actividad económica del país en el marco de la pandemia y el paro nacional.
Sobre las coyunturas, Jaramillo explicó que, efectivamente, hay una serie de situaciones que no ayudan a reactivar el proceso económico de Colombia.
«Eso realmente está dañando la economía de una manera significativa», dijo Jaramillo a Bloomberg. Sobre este punto, hay que recordar que, solo del lado del paro, el país ha perdido poco más de $6,2 billones, según el ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo.
La visión de Jaramillo da para no alcanzar un rebote del PIB de las magnitudes esperadas por el equipo técnico del Banco de la República. “No creo que lleguemos al 6 %. Esto es algo que disminuirá la capacidad de Colombia para recuperarse”.
Entre las variables que sigue de cerca el codirector del Banco de la República se tiene en cuenta el comportamiento de la inflación que según han manifestado varios analistas, por la misma coyuntura, podría llevar a que el 3 % anual se manifieste antes de lo esperado.
“En la medida en que vuelva a la normalidad, está bien permitir que la inflación supere un poco el objetivo. Al menos en mi mente. La Junta es de siete personas, yo soy solo una de ellas”, reiteró Jaramillo.
Un tema que ha sido recurrente para Gobierno e incluso para Leonardo Villar, gerente del Banco de la República, tiene que ver con el riesgo de pérdida de grado de inversión para Colombia en caso de que no se apruebe una reforma tributaria sólida.
Jaramillo también se refirió a lo que está pasando con los Títulos de Tesorería de Colombia, que el mercado ya trata como si el país estuviera próximo a perder el grado de inversión.
Al respecto, Jaramillo aseguró: “Al final del día, no es gran cosa. Los países que se convierten en ángeles caídos pueden regresar bastante pronto”.
Tras la más reciente Junta Directiva del Banco de la República, Villar aseguró que el emisor está preocupado por esos incrementos en los TES y volvió a hacer un llamado para contar con una política fiscal sólida, para que la política monetaria pueda seguir trabajando por la reactivación.
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