Un estudio de Fedesarrollo en conjunto con el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo y Colombia Productiva, analizó los logros de este programa que busca mejorar la productividad de las empresas
Este programa del gobierno colombiano para mejorar la productividad de las empresas del país es un esquema traído de Estados Unidos, Japón, Chile y Marruecos y de hecho, de este último país es de donde se trae el nombre del programa que ha beneficiado a casi 3.000 empresas de Colombia.
Con el objetivo de analizar su panorama y detectar oportunidades de mejora, el gobierno colombiano, representado por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, como también Colombia Productiva, encargó un estudio a Fedesarrollo sobre Evaluación Institucional de Fábricas de Productividad y la Base Nacional de Extensionistas. Vea más información en empresas.
De acuerdo con el análisis, que se realizó en 1.035 empresas micro, pequeña, medianas y grandes empresas, se detectó que la mayoría (un 50 %) de las beneficiarias son pequeñas empresas y de grandes empresas hay pocas en el programa.
Buena parte de las compañías beneficiarias están localizadas en Bogotá, Medellín y en Santander y además se encontró que la antigüedad ronda los 10 a 20 años.
La principal falla que encontró el estudio es que las empresas no son más productivas debido a que en la alta dirección no se encuentran las habilidades gerenciales necesarias. “Según varias fuentes de información, el 65 % de las razones por las cuales las empresas pueden ser más productivas residen en el interior de la organización”, indicó el ministro de Comercio, José Manuel Restrepo Abondano, en la conferencia virtual para presentar los resultados del estudio.
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A su turno, Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, centro económico que realizó el estudio, indicó que la productividad va de la mano del crecimiento económico y que este tema debe seguir siendo una política de Estado. “Celebro esta iniciativa del gobierno nacional que va encaminada en la agenda que tiene de perseguir un aumento de la productividad que por ende, es la vía del crecimiento económico”, explicó.
Otros resultados
Según las conclusiones, una gran mayoría de empresas reporta resultados en mejora de la productividad de hasta tres dígitos, pero según Rafael Puyana, investigador asociado de Fedesarrollo, esto puede obedecer a que las metas de productividad de las empresas son demasiado bajas, por lo cual medir su aumento de productividad puede distorsionar el resultado.
Por lo anterior, propuso que para entrar a Fábricas de Productividad se debería exigir como requisito de facto una productividad de 8 % como mínimo. Además, resaltó que la evaluación muestra resultados sobresalientes en muchos frentes de intervención, reflejo de un modelo exitoso y valorado por los empresarios.
La evaluación señala las oportunidades de mejora en el uso de los indicadores y metas del programa, dado que tiene una doble función: buscan hacer una evaluación centralizada y, al tiempo, ser usadas para el seguimiento micro.
El estudio recomienda separar estas dos funciones, creando un catálogo reducido de indicadores de seguimiento centralizado, y por otra parte, un menú de opciones de indicadores que los extensionistas y las empresas puedan utilizar pero que no sean obligatorios.
Señala también que Fábricas de Productividad, desde el arranque, tienen un conjunto de requisitos de entrada que son claros y además de fácil verificación.
