Las condiciones del mercado laboral en las principales economías de Latinoamérica se mantendrían débiles en los próximos dos años, de acuerdo con un nuevo informe de Moody’s Investors Service.
La situación de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú podría presentar consecuencias a largo plazo para algunos sectores, a pesar de la esperada recuperación tras la Covid-19.
Moody’s dice que la pandemia impulsó a una contracción mayor a la que se registró tras la crisis económica de 2008 y 2009, por lo que es difícil que las condiciones de empleo retornen a la normalidad en el corto plazo.
Particularmente, esa situación afectaría más a la población joven de la región, un grupo que desde antes presentaba retos para insertarse en el mercado laboral.
En Colombia, el 17 % de los jóvenes de la generación Z carecen de ocupación, mientras que el 8,2 % están desempleados. En Chile esos indicadores se ubican 18,5 % y 10,6 %, respectivamente; al tiempo que en Brasil están en 31,4 % y 14,2 %.
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“Las débiles tendencias del empleo persistirán y tendrán implicaciones negativas para la recaudación de ingresos de los gobiernos locales y regionales de cada país”, escribió Moody’s.
México pasó de tener un nivel de desempleo de 3,37 % en diciembre de 2019 a superar el 5,1 % en junio de 2020. Además, la población ocupada en el sector informal se incrementó.
La situación del empleo en Argentina se agravó con la crisis económica por la que pasa el país, marcando una poca creación de empleos y la acentuación de la pobreza.
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Mientras que en Perú “se presentó la peor contracción de las economías latinoamericanas”, marcada por el amplio periodo de aislamiento que decretó este país, dice Moody’s.
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