Luego de absolver al expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en el juicio político que se le llevaba por los disturbios en el Capitolio Nacional, en Washington, el Congreso de ese país tendrá la misión de enfocarse en sacar adelante un nuevo paquete de salvamento económico.
La Casa Blanca confirmó que hoy el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, presentará el proyecto de Ley de estímulo fiscal ante el Congreso para avanzar en la agenda legislativa económica.
La iniciativa es fundamental toda vez que el mercado e inversionistas están a la espera de cuál es el margen de maniobra para inyectar liquidez a la economía de Estados Unidos, seriamente afectada por la crisis del coronavirus.
Con la agenda legislativa un poco menos apretada, la bancada republicana y demócrata ahora tendrá que discutir y votar una iniciativa que se espera entregue US$1,9 billones a la economía estadounidense.
Transferencias directas a hogares por cerca US$1.200 por adulto y de US$500 por cada niño son algunos de los puntos sustanciales de ese proyecto, que se espera sea motor del rebote económico que experimentaría el país en 2021.
El plan de salvamento económico también contempla beneficios para las empresas más afectadas por la pandemia. Ayudas que se espera mejoren las oportunidades de empleabilidad en esa nación.
Precisamente uno de los temas que más preocupa a la Reserva Federal tiene que ver con el hecho de que los indicadores de empleabilidad siguen siendo muy bajos y por esto se hace difícil garantizar una recuperación sostenida en el mediano plazo.
Hay que recordar que el PIB de Estados Unidos se contrajo 3,5 % en 2020, según registros de la Oficina de Comercio.
Se espera pues que el Congreso destrabe un plan que para organismos multilaterales se convierte en piedra angular para que pronósticos, como el del Fondo Monetario Internacional (de un crecimiento del 5,1 % en 2021), sean una realidad.
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