En sesión plenaria, la Cámara de Representantes de Colombia aprobó la nueva Ley del Emprendimiento, política pública con la que, entre otros, el Gobierno y el legislativo buscan que las firmas nacientes tengan mejor margen de maniobra.
La iniciativa, que falta por discutirse en plenaria del Senado se basa en cinco aspectos: tarifas diferenciales, reducción de cargas a emprendedores, facilidades de acceso al mercado y compras públicas, además de un capítulo correspondiente al mejoramiento de las habilidades y educación para saber emprender en Colombia.
Christian José Moreno, ponente del proyecto y representante a la Cámara por el Partido de la U, aseguró que este proyecto de Ley busca otorgarle oportunidades al trabajador independiente y “al informal para que se formalice y brinda oportunidades a múltiples colombianos que lo que piden es que su oportunidad pueda materializarse y ser realidad”.
La Ley de Emprendimiento, en el marco de su discusión y aprobación tuvo una serie de cambios. Algunos de los más importantes tuvieron que ver con proposiciones del representante por la Alianza Verde, Mauricio Toro.
Entre estas se cuenta la aprobación de incluir al sector financiero y de seguros en el Sandbox Regulatorio, iniciativa que se pedía desde el Plan Nacional de Desarrollo (PND).
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Adicionalmente las micro, pequeñas y medianas empresas podrían buscar préstamos en entidades no vigiladas por la Superintendencia Financiera, con lo que se abre la posibilidad a que estas compañías tengan financiamiento a través de microcréditos de sociedades Fintech.
Sobre la aprobación en Cámara de estas iniciativas, el ministro de Comercio, Industria y Turismo, José Manuel Restrepo, dijo: “Es una plataforma de reactivación y generación de empleo, de generación de ingresos y de construcción para el emprendimiento. La Ley es una respuesta a los emprendedores porque crea acceso a mercados a través de compras públicas”.
Esta iniciativa de emprendimiento también contará con un marco jurídico para habilitar el trabajo remoto más allá del teletrabajo, teniendo en cuenta que el uso de tecnologías abarata costos laborales y garantiza el mantener puestos de trabajo.
“Se crea emprendimiento de alto impacto, incluyente, en las regiones, en los municipios, en el agro y en distintos sectores de la economía donde es indispensable, con enfoque diferencial, de género, de región, pensando en las minorías étnicas, en las energías limpias, la tecnología y en el deporte”, concluyó Restrepo.
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