El viceministro técnico de Hacienda de Colombia, Juan Pablo Zárate, detalló hoy su visión de varios aspectos de largo plazo que pesarán en el desempeño económico como la deuda del Gobierno, la Regla Fiscal y el plan de recuperación.
El funcionario reconoció que “la recuperación de la desaceleración puede ser moderada” tal como lo muestran algunos de los indicadores líderes de la economía local.
Eso después de que la economía sufriera en el segundo trimestre de 2020 su peor caída en la historia.
El funcionario reiteró que el plan de acción inmediato del Gobierno Nacional será renovar varios de los programas de apoyo social como Ingreso Solidario y ampliar la red de solidaridad social hasta junio de 2021.
Así mismo, ampliar el apoyo a las nóminas de las empresas a través del Paef hasta marzo de 2021. Ese proyecto ya pasó su trámite en el Congreso.
Así mismo, dijo ampliar los programas de capitalización del Fondo Nacional de Garantías (FNG) para garantizar más créditos a las compañías y apoyar la reactivación empresarial.
Zárate fue enfático al decir que los niveles actuales de la deuda no tienen cómodo al Gobierno y por eso se debe apalancar la inversión de la recuperación en el gasto privado.
Ratificó la necesidad de hacer una reforma fiscal que recaude dos puntos del PIB para apuntalar el crecimiento y retornar a niveles de deuda de años anteriores.
En su discusión en un evento convocado por Credicorp Capital, el viceministro dijo que el plan de largo plazo para la reactivación de la economía tendrá un componente de apoyo al empleo por unos $130 billones, en tanto el crecimiento por el crecimiento limpio ascenderá a $19 billones.
El viceministro dijo que los apoyos a los más vulnerables serán de $17 billones y los compromisos con el campo y la paz, de $3 billones.
Hacia adelante
Zárate reconoció que la segunda generación de programas de apoyo social mencionada anteriormente no estaba incluida en el Marco Fiscal de Mediano Plazo y eso puede representar medio punto del PIB (unos $5 billones) a lo que se suma algo de gasto en salud, pero, en su concepto, será un aumento marginal.
“La capacidad fiscal para ser contracíclicos es limitada, estamos usando lo que podemos”, aseveró tras advertir que en un enfoque fiscal se puede tener deuda confortable que no tiene que ser del 32 % como en años pasados, pero que puede llegar a 60 % (del PIB) y volver a bajar en choques como este. “Es una deuda más alta de la acostumbrada, pero puede ser razonable y para eso necesitamos una reforma fiscal importante”, añadió.
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