Apenas dos años después de haber asumido el cargo, en las próximas semanas Bernardo Noreña dejará de ser el presidente de la Corporación Financiera Colombiana (Corficolombiana).
El ejecutivo llegó a la filial del Grupo Aval en mayo de 2016 para ordenar a la entidad después de haber sido el foco de atención de los medios de comunicación y de la justicia por su relación en el contrato de la Ruta del Sol 2 que tuvo denuncias de corrupción de parte de la brasileña Odebrecht.
El directivo que deja a la firma se ha desempeñado en otros cargos importantes en el sector financiero como la Presidencia del Citibank Colombia.
Se desconocen las razones que motivaron la renuncia de Bernardo Noreña de Corficolombiana, así como quién será su reemplazo.
Noreña llegó para reemplazar a José Elías Melo quien fue acusado de tener conocimiento de las irregularidades en el caso de la brasileña y estuvo privado de la libertad hasta enero pasado cuando un juez le otorgó la libertad tras acoger el argumento de su defensa en cuanto a que no representaba un peligro para la sociedad.
A pesar de la libertad, la Fiscalía lo acusa de ser el responsable de los delitos de cohecho y celebración indebida de contratos por haber conocido, al parecer, los sobornos dentro del contrato de la Ruta del Sol 2.
Según la investigación, Luiz Bueno Junior, expresidente de Odebrecht en Colombia, tuvo el visto bueno de Episol (filial de Corficolombiana) quien era su socia en la Concesionaria Ruta del Sol, para asegurar la licitación a cambio de US$6,5 millones que fueron girados el exviceministro de Transporte, Gabriel García Morales.