El Instituto Internacional de Investigación (IRI) de la Universidad de Columbia en Estados Unidos señaló que, a mediados de agosto de 2018, las aguas tropicales del este y el centro del Pacífico reflejaban condiciones neutrales de la oscilación del sur El Niño (Enso, por su sigla en inglés), con una temperatura sobre la superficie del mar casi media, ligeramente más baja que hace un mes.
Las variables atmosféricas clave también sugirieron condiciones neutrales, aunque recientemente se han desarrollado anomalías del viento de bajo nivel del oeste.
La temperatura del agua subsuperficial continuó siendo superior a la media. La perspectiva oficial de Centro de Predicción Climática / IRI requiere condiciones neutrales durante el resto del verano boreal, con un 60 % de posibilidades de que El Niño se desarrolle durante el otoño, llegando al 70 % en el invierno entre 2018 y 2019.
En el reporte del mes pasado, la probabilidad de El Niño había aumentado aproximadamente hasta 70 % para agosto-octubre y, principalmente, hasta entre 80 % y 90 %, desde septiembre-noviembre a marzo-mayo de 2019.
Los últimos pronósticos de modelos estadísticos y dinámicos favorecen colectivamente el desarrollo débil de El Niño a comienzos del otoño, alcanzando una fuerza débil o posiblemente moderada durante el final del otoño y el invierno; la mayoría de los pronosticadores están de acuerdo con este escenario.
