El superintendente financiero, Jorge Castaño, reveló hoy que se está analizando la posiblidad de eliminar la restricción para el uso de teléfonos celulares en las oficinas bancarias.
Aseguró que es una restricción que no favorece la digitalización de los servicios bancarios y no permite avanzar en la inclusión social.
El superintendente finaniero aclaró que la restricción se eliminaría en las sucursales donde haya menos flujo de efectivo, pero que se podría mantener en las que hay un «muy alto» flujo para garantizar las condiciones de seguridad de los usuarios.
La Superintendencia evalúa además el visto bueno para la creación de sedes bancarias completamente digitales.
El objetivo de esas medidas es avanzar hacia la total inclusión financiera y eliminar el uso del efectivo para mejorar la seguridad y la eficiencia del sistema.
Les pidió a los bancos la implementación de nuevas tecnologías para agilizar la inclusión financiera tales como reconocimiento por biométrica y reconocimiento facial.
Para Castaño, es necesario moverse en el sistema financiero hacia la implementación de corresponsales no bancarios móviles.
Eso, dijo, para llegar a los territorios que se han quedado atrás en la inclusión financiera y en el beneficio de sus servicios.
Las propuestas del funcionario se dieron en la presentación de las cifras del Reporte de Inclusión Financiera de 2017.
